sábado, 14 de abril de 2012

Una imagen vale más que mil palabras

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La apelación a la violencia es continua en la izquierda de este país.
Con esta imagen de la guillotina demuestran que perdieron la cabeza hace mucho tiempo.
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7 comentarios:

José Manuel Guerrero C. dijo...

En nombre de la revolución muchos sacerdotes fueron enviados al cadalso y muchas religiosas fueron perseguidas y asesinadas en los pontones de Nantes que eran hundidos en el mar después de haber amontonado dentro de ellos a todos los sacerdotes fieles.

Creo que fue Posodo -sin el saberlo- el que me descubrió la dramática historia de los Pontones franceses.

A estos pringadillos de IU desconocer la historia de la humanidad no le exime de su mala baba. No se le puede pedir peras al olmo.

José Manuel Guerrero C. dijo...

No quiero hacer sangre, pero otro que saca a pasear la guillotina nada más tiene oportunidad es Pérez Reverte.
El mismo artista que pide prisión para un obispo católico por ser fiel a la doctrina católica.


En fin. Las cosas va cuadrando, y a mi no me quedan dudas que los que se hagan llamar católicos dentro de unos años estarán condenado a las catacumbas. Cuando no al caldaso.

José Manuel Guerrero C. dijo...

Perdón por la sintaxis, y por la grafía.

posodo dijo...

Bueno, y aunque sea no exactamente igual, no sólo la izquierda.

caraguevo dijo...

Bate: ¿Desconocer la historia? No, se la inventan,ayer decían que uno de los grandes logros de la constitución republicana era el haber conseguido el voto femenino.
Lo que no decían era que el PSOE votó en contra del voto femenino porque consideraba que sería manipulado por los maridos o los curas.

El problema de desconocer la historia es que todos desconocemos la historia, porque la derecha no responde, o no sabe, o no quiere como bien dice posodo.

El obispo de Alcalá, si es al que te refieres, es un conocido metepatas, en este caso se han juntado la mala redacción de su homilía con la manipulación que ha sufrido.
Esto último ha sido tan palmario que hasta compañeros suyos han picado y han puesto tierra de por medio.
Pérez Reverte picó y yo también. Al cabo de dos días encontré el texto original, pero no porque la Iglesia lo hubiera difundido sino porque un bloguero dedicó su tiempo a transcribirlo.
A ver si esto le sirve de lección al obispo.

Un saludo a los dos

José Manuel Guerrero C. dijo...

"Pérez Reverte picó .."

A Pérez Reverte no hace falta picarle para que el nota suelte los demonios que lleva dentro. El solito se basta. No es la primera vez que señala -otras veces lo ha escrito en artículos en el suplemento del ABC (el falso ABC, no el verdadero) que en España hubiera o hubiese venido bien llevarse por delante a algún que otro obispo. Anticlericalismo en estado puro.

¡¡¡Hay que joderse con el plumilla cartaginense!!!, y esto, los pocos curas que se han matado lo dice en el país que pasó esto:

Al término de la contienda (Guerra civil española), según el estudio de Antonio Montero Moreno, historiador y periodista que fue arzobispo de Mérida-Badajoz entre 1994 y 2004, que fue su tesis doctoral por la Universidad de Salamanca, el número de religiosos asesinados en la retaguardia republicana ascendió a 6.832, de las cuales 4.184 eran sacerdotes, 2.365 frailes y 283 monjas.44 Otras fuentes promovidas por la Iglesia, entre ellas el estudio de Vicente Cárcel Ortí para la preparación del "catálogo de los mártires cristianos del siglo XX", solicitado por el papa Juan Pablo II en el marco del Gran Jubileo del Año 2000 amplían la estimación con 3.000 seglares, en su mayoría pertenecientes a la Acción Católica, con lo cual estiman en torno a 10.000 el número de víctimas pertenecientes a organizaciones eclesiásticas.45
Los obispos asesinados fueron:
Florentino Asensio Barroso, obispo de Barbastro (1877-1936);
Manuel Basulto Jiménez, obispo de Jaén (1869-1936);
Manuel Borrás Ferré, obispo auxiliar de Tarragona (1880-1936);
Narciso de Esténaga Echevarría, obispo de Ciudad Real (1882-1936);
Salvio Huix Miralpeix, obispo de Lérida (1877-1936);
Manuel Irurita Almándoz, obispo de Barcelona (1876-1936);
Cruz Laplana y Laguna, obispo de Cuenca (1875-1936);
Manuel Medina Olmos, obispo de Guadix (1869-1936);
Eustaquio Nieto Martín, obispo de Sigüenza (1866-1936);
Anselmo Polanco Fontecha, obispo de Teruel (1881-1939);
Juan de Dios Ponce y Pozo, administrador apostólico de Orihuela (1878-1936);
Miguel Serra Sucarrats, obispo de Segorbe (1868-1936) y
Diego Ventaja Milán, obispo de Almería (1880-1936).


Un saludo

caraguevo dijo...

Bate: A lo mejor el único que picó fui yo y Peréz-Reverte ya sabía de las verdaderas manifestaciones del obispo, no lo sé.
Sigo al académico desde hace poco, aparte de libros que leía años ha, y leo las columnas que comparte en Twitter y ahí se acabó.

Lo de llevarse por delante a algún que otro obispo no sabía que lo hubiera dicho, pero me recuerda lo que le decían a Tarancón: ¡Tarancón al paredón! y no se lo decían los comunistas, sino supuestos cristianos católicos apostólicos romanos.

En cualquier caso, gracias por la información, a partir de ahora leeré al compi de Anson y de Janli con el colmillo retorcido.

Por cierto, el cardenal de Burriana da nombre a una plaza virtual a unos 300 metros de mi casa.

Un saludo